La muerte de Heredia, según Gregorio Paz.
En el diario “El Nacional” de Montevideo, el 25 de enero de 1839 se publicó una “relación” del general Gregorio Paz, sobre el asesinato del gobernador de Tucumán, general Alejandro Heredia, perpetrado el 12 de noviembre de 1838. Como se sabe, el hecho ocurrió en una emboscada que prepararon sus enemigos. La “relación” de Paz de “El Nacional”, fue transcripta en el periódico rosista “La Gaceta Mercantil”, que se editaba en Buenos Aires, en su edición del 4 de diciembre de ese año 1839.
Expresaba que “el comandante (Gabino) Robles, jefe de los asesinos, que había sido insultado por Heredia, juró vengarse en la primera oportunidad, quitándole la vida con sus propias manos”. Así, cuando apareció en el camino la galera en la que viajaba Heredia rumbo a su finca “Arcadia”, se aproximó Robles con sus cinco secuaces, “en el punto llamado Los Lules”. Allí Robles, “con un ademán de placer y feroz satisfacción. ‘¡Párese esa galera!’, gritó el que buscaba venganza. Entonces el gobernador Heredia, que medio había podido incorporarse, le dijo con la más clamorosa y conmovida voz: ‘¿Qué quiere usted, Robles? ¿Quiere el gobierno? Ahí lo tiene usted. ¿Quiere usted dinero? Le daré cuanto usted necesite”.
Interrumpiendo estas ofertas del “desmayado general”, el comandante Robles le dijo: “No, cobarde, perverso, no quiero dinero, ni el gobierno: tu vida es lo que quiero, monstruo degradado, y nada más que tu vida”. En seguida, a tiempo que disparaba “un pistoletazo en la cabeza de Heredia”, exclamó: “Ya me vengué”. En cuanto al gobernador, seguía el relato de Paz, “cayó herido en el fondo de la galera, gritando: ´No me maten, misericordia, socórranme por Dios’ y otras cosas semejantes”