Moción de dividir el Congreso en dos salas.
Uno de los temas importantes que estaban en la agenda de debates del Soberano Congreso, era el reglamento que se debía confeccionar, para fijar las facultades del Director Supremo. Se había nombrado una comisión para redactarlo. Tal fue el tema central de la sesión que celebró el cuerpo el 27 de septiembre de 1816.
Según la crónica de “El Redactor”, los diputados dedicaron preferente atención al capítulo que fijaba el establecimiento de un Senado en la Capital. Este punto fue objeto de un debate que se prolongó “por un dilatado tiempo”. Se discutía si ese Senado debía suprimirse con motivo del traslado del Congreso a Buenos Aires –cosa ya decidida- o si, mientras esa mudanza se verificaba, se nombrarían personas de fuera de su seno que formasen ese Senado, en forma provisoria.
Durante el cambio de opiniones que mereció el asunto, hubo una moción del doctor José Mariano Serrano. Este propuso que, inmediatamente después del arribo del Congreso a Buenos Aires, el mismo se dividiera en dos salas. Una sería de “Representantes” y otra de “Senadores”. Ambas, sin perjuicio de las atribuciones que invistieran, servirían como un organismo de consejo del Director Supremo. Los diputados apoyaron de modo suficiente la moción del doctor Serrano, pero la contradijo el doctor Juan José Paso. “El Redactor” no detalla los argumentos que dicho diputado esgrimió. Su crónica se limita a expresar que la sesión del Congreso se cerró “con un debate detenido sobre una comunicación reservada, que consta en el libre respectivo”.