Los informes del comisionado del Congreso.
El 11 de junio de 1816, celebró sesión el Congreso de las Provincias Unidas. En las bancas se sentaban solamente dos diputados por Tucumán, desde el día anterior. Se había incorporado Pedro Miguel Aráoz, en tanto José Serapión de Arteaga renunció desde la barra. La vacante creada ya nunca iba a cubrirse. Su consecuencia fue que Tucumán tuvo solamente dos representantes en el Congreso (Thames y Aráoz), en lugar de los tres que le correspondían.
El cuerpo leyó un pliego del Cabildo de Jujuy, que narraba las demostraciones con las cuales se solemnizó el reconocimiento del Soberano Congreso. También se tomó conocimiento de oficios del Director Supremo, respecto de las turbulencias de La Rioja. Daba cuenta de las instrucciones que había dado al respecto, tanto al teniente coronel Alejandro Heredia, comisionado del Congreso, como al Director interino, en Buenos Aires.
Luego se leyeron documentos relativos a la negociación celebrada entre Buenos Aires y Santa Fe, que adjuntaba el diputado Miguel Calixto del Corro. Allí daba cuenta de la garantía que ofreció en ese tratado.
Según la crónica de “El Redactor”, cuando se quiso traer a discusión este punto, para acordar lo que debía contestarse, “expusieron los diputados de Buenos Aires que el breve tiempo del resto de la sesión, no daba lugar a tomar una resolución con la madurez que exige la gravedad de la materia”. Entonces, se dispuso diferir para otra sesión el tratamiento del asunto. Lo mismo se resolvió acerca del examen del diploma del doctor José Andrés Pacheco de Melo, diputado por Chichas.