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UNA CARRETILLA. En este tipo de vehículo viajaba Pedro José Velarde, cuando el Congreso le aplicó un empréstito forzoso.

“El Redactor” afirma que el Congreso celebró seis sesiones extraordinarias en los días 29, 30 y 31 de diciembre de 1816, pero no consigna crónica de las mismas. Lo que sí dice, en un editorial, es que en esas reuniones se trató el inmediato traslado de la corporación a Buenos Aires.


El Congreso dejó la sede tucumana en febrero de 1817

Las sesiones públicas posteriores en San Miguel de Tucumán tuvieron lugar los días 1, 2, 3, 10, 11, 14, 15, 16 y 17 de enero, y las secretas se realizaron el 7, 8, 9, 10, 11, 17, 24 y 4 de febrero de 1817. Esta fue la última de las llevadas a cabo en nuestra ciudad.

Carecemos de espacio para resumir los temas que se trataron, y que fueron de variada índole. Desde las negociaciones con la corte del Brasil hasta el caso José Moldes, las deliberaciones tuvieron un arco de asuntos muy amplio. En cuanto al traslado en sí, la secreta del 7 de enero evaluó los fondos necesarios para costear el viaje de los diputados a Buenos Aires, además de afrontar “las asignaciones que se adeudan por algunos meses a los señores expensados por el erario del Estado, costos del envío del archivo de secretaría y otros que debieran hacerse”. Se acordó que 12.000 pesos serían suficientes.

En cuanto a cómo conseguirlos, en la secreta del 11 de enero se dispuso ordenar, al teniente de gobernador de Santiago del Estero, que “detenga o haga retroceder” a Pedro José Velarde y su carretilla, en la cual llevaba caudales a Buenos Aires. Le debería exigir, como empréstito forzoso, la cantidad de 8.000 pesos, que le serían restituidos por “las Cajas Generales de la Capital a 15 días vista”. En Buenos Aires empezarían el 19 de abril las sesiones preliminares del Congreso, y recién el 12 de mayo de 1817 se iniciaron las regulares.