El adiós de Avellaneda a su tierra
En 1884, ya muy enfermo, Nicolás Avellaneda volvió por última vez a Tucumán. Permaneció entre sus comprovincianos de julio a octubre, salvo diez días en Rosario de la Frontera.
Un luminoso mosaico de hierros
En tiempos coloniales, las rejas de esta zona del país fueron de madera, antes de ceder paso al “fierro vizcaíno”. Luego, sus líneas simples serían reemplazadas por una profusa ornamentación.
La “historia chica” de gobernadores
Cartas privadas, notas de prensa, libros de memorias y otras fuentes, registran curiosidades de varios gobernantes del siglo XIX: detalles físicos, actitudes curiosas, pequeñas manías y un gran etcétera.