Autoría: Carlos Páez de la Torre
Editorial: Ed. Centro Cultural Alberto Rougés – Fundación Lillo, Tucumán, 2006
ISBN: 987-97722-6-1
Cantidad de páginas: 320
La más superficial mirada a la cultura de Tucumán durante la primera mitad del siglo XX, encuentra de inmediato la figura del doctor Juan Heller Integraba la Generación del Centenario, como Juan B. Terán, Alberto Rougés Ernesto Padilla, Miguel Lillo, Ricardo Jaimes Freyre, Julio López Mañán, José Ignacio Aráoz, para citar a los más conocidos.
Con estos hombres compartió las inquietudes que hicieron crecer nuestra vida artística, literaria y científica, hasta estadios que hoy nos admiran. Formaron un equipo, que arrancó con la Sociedad Sarmiento, que dio calor a la fundación de la Universidad de Tucumán y que haría perdurar en el tiempo el legado espiritual y material del sabio Miguel Lillo.
Heller fue miembro del primer Consejo Superior vicerrector y profesor de la alta casa de estudios, director fundador del Museo de Bellas Artes, presidente de la Comisión Asesora Vitalicia de la Fundación Miguel Lillo, incansable animador de la Filarmónica de Tucumán.
Eso ya sería suficiente para asegurarle un sitio honroso en la trayectoria cultural de la provincia. Pero este abogado de formación clásica, erudito, músico, traductor de prosa y de poesía, fue al mismo tiempo un fino jurisconsulto y un memorable magistrado. Presidio durante dos décadas la Corte Suprema de Justicia de Tucumán, y todavía resuena en la memoria pública lo mucho que hizo para dar independencia, prestigio y eficacia a ese Poder Judicial que honró hasta último día de su vida.
A pesar de la abundancia de su tarea escrita, el doctor Heller no la compiló en libros, y la dejó dispersa en una variada cantidad de publicaciones periódicas. Esa circunstancia la ha hecho de difícil acceso, Las generaciones actuales no han podido familiarizarse con la agudeza de sus reflexiones jurídicas y literarias, con la sensibilidad de su espíritu de artista, con su juicio sereno sobre los hombres y las grandes cuestiones que agitaban a su tiempo.
Este libro ofrece una noticia biográfica, más una selección de sus escritos jurídicos, jurídico-literarios, literarios, discursos y traducciones de poesía. No es una compilación exhaustiva que algún día deberá efectuarse pero ofrece una muestra reveladora de la producción del ilustre tucumano. Pensamos que, de esa manera empieza a pagarse la deuda que con el doctor Juan Heller mantiene nuestra cultura.