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Fue depositada en la Comandancia en 1909.
¿Existirá aún la “bandera fundadora” del Cuerpo de Bomberos de Tucumán? El 18 de noviembre de 1909, jefes y oficiales la depositaron en la Comandancia, que ejercía Cristóbal Araujo. El acta –notablemente confusa- la describía como un cuadrilongo de raso de seda de 1.30 por l metro. Al centro llevaba “el atributo de Bomberos y el sol, ambos dorados y de color marrón claro, y alrededor un fleco de hilo de oro de 5 centímetros de ancho”. Luego pasaba a enumerar, con increíble detalle, los tizados, zurcidos y manchas que tenía “a consecuencia de los muchos años pasados”.
Al “atributo” o sea la insignia, decía, “lo forman dos hachas de una longitud de 49 centímetros el mango de cada una de ellas, colocadas en dirección opuesta, y la parte inferior de los mangos superpuestos formando un ángulo agudo vuelto hacia abajo y cuyo vértices es común a otro ángulo que, en sentido contrario al anterior, lo forma la parte superior de los mangos, dejando un espacio en el que está colocado el sol, cuyo diámetro es de 10 centímetros y los rayos de una longitud de 7 centímetros; este sol se encuentra superpuesto a otro cuya cara está visible, a excepción de la parte inferior, que la cubren los rayos y fracción del sol que está encima. La intersección de los dos ángulos, formada por los mangos de las hachas, está sujeta por una cinta de 5 centímetros de ancho, terminando ambas puntas en un calado; la parte superior de los mangos es de forma esférica. El otro costado es casi análogo al ya descripto, a excepción de las manchas color carmín que no las lleva y el sol, cuya cara es apenas perceptible a causa del color amarillo subido con el que está pintado y de los tizados, llevando tan sólo un pequeño rasgado en la faja blanca y a 45 centímetros de la parte sujeta a la lanza”.