
Criterio de Alfredo Colmo en Tucumán, en 1916
En 1916, con motivo del Centenario de la Independencia, el Gobierno de Tucumán organizó en esta ciudad el Congreso Americano de Ciencias Sociales. Fue una reunión científica muy importante, a la que concurrieron y presentaron ponencias notabilidades de todo el país. Sus actas se editaron en Buenos Aires en una “Memoria”, tomo de 971 páginas que apareció al año siguiente.
Entre los trabajos notables allí publicados, está “La reforma de la ley en países americanos”, firmado por el doctor Alfredo Colmo, que llena las páginas 642 a 646 del citado tomo. El doctor Colmo (1878-1934), abogado y magistrado, fue uno de los más afamados catedráticos y tratadistas de Derecho Civil del siglo que pasó.
Afirmaba que en el continente no existía en ese momento ningún “clamor público” que pidiera la reforma de los códigos. Sólo había “opiniones individuales del gremio que más derecho tendría para realizarla, pero que menos títulos posee para pedirla: aludo a los profesores o escritores de cosas jurídicas, embebidos de pre-concepciones doctrinarias, seducidos por los artificios técnicos y encariñados con teorías, construcciones y sistemas que estarán muy buenos para los libros y para los cursos de las cátedras, pero que distan de congeniar con el derecho de la realidad”.
Y en cuanto a las leyes especiales, decía que “convendría que nuestros parlamentos se asesoren en forma antes de dictarlas”. Esto porque, subrayaba, “como es sabido y lo tengo apuntado más de una vez, los Congresos no ofrecen una garantía muy segura de conocimientos de Derecho, y de la técnica científica contenida en la labor legislativa”.