Envío de Roca para el parque de San Pablo
La familia de los industriales azucareros Nougués tuvo siempre gran amistad con el general Julio Argentino Roca. Los hombres de aquel apellido que actuaron en política, secundaron siempre la conducción del vencedor de Santa Rosa.
Así, por ejemplo, fueron conspicuos “roquistas” el doctor Miguel M. Nougués, gobernador de Tucumán y luego miembro del Senado de la Nación quien, como titular de esa alta Cámara, fue presidente interino de la República en 1892. O el ingeniero Luis F. Nougués, quien fue gobernador de Tucumán de 1906 a 1909.
La amistad, como era sincera, perduró mucho después de haberse retirado Roca de la política, al concluir su segunda presidencia. Se conserva una carta del general, dirigida al ingeniero Nougués, con fecha el 10 de agosto de 1909, desde Buenos Aires.
Dice: “Como sé que es Ud. muy aficionado a plantas, le he remitido ayer, para el parque de San Pablo, unas palmeras reales (‘arcodoxas regias’) hijas de una que tengo en casa, la única tal vez del país tan grande y que dé semillas”.
Agregaba: “Usted sabe cuánto contribuyen estas soberbias palmeras a realzar las bellezas de Río de Janeiro. En Tucumán se desarrollarán con la misma facilidad y producirán el mismo efecto”.
Terminaba con una promesa. “El año próximo puedo mandarle una buena cantidad de semillas para que las distribuya entre los aficionados a estas cosas”. Si Roca cumplió con el envío, ¿existirán en Tucumán otros ejemplares de ‘arcodoxas regias’ nacidas de esas semillas?