Los estudiantes se rebelaron en 1922
La primera protesta estudiantil que registra la historia de la UNT ocurrió en 1922, es decir un año y cinco meses después de concretada (3 de abril de 1921) la nacionalización de la casa de estudios.
Al tomarse esta última medida, el Gobierno Nacional la había puesto a cargo de Alejandro Grünning Rosas, como delegado interino. En diciembre de 1921, fue designado “encargado ad honorem” el diputado nacional José Luis Aráoz. Pronto, se inauguró un clima de tensión entre el nuevo delegado y el sector estudiantil. A esto se agregó el hecho de que el Gobierno de la Provincia no terminaba de enviar a la Legislatura, para su ratificación, el convenio “ad referendum” que nacionalizaba la casa.
En agosto, los estudiantes pidieron la renuncia del nada flexible delegado Aráoz. Hicieron más. A las dos de la mañana del 22 de setiembre, los alumnos tomaron la Universidad por primera vez en su historia. En una resolución de la Federación Universitaria Tucumana, resolvían que el establecimiento sería entregado “únicamente al interventor que nombrase el Exmo. Presidente de la República Argentina”.
El doctor Aráoz, que estaba en Buenos Aires, se presentó al despacho el día 24 y los huelguistas desconocieron su autoridad. El 25, la policía de la provincia los intimó a abandonar el local, orden que fue acatada. El 11 de octubre, el presidente Hipólito Yrigoyen, en dos decretos, estableció las facultades y planes de estudio de la casa, y designó rector al doctor Felipe S. Pérez, además de nombrar un nuevo Consejo Directivo. Dispuso que la Universidad, por el momento, se regiría con los estatutos de la Universidad del Litoral, “en todo lo que sean aplicables”.