Serrano marcó la materia a la que se ceñiría.
El diputado por Buenos Aires al Congreso, doctor Pedro Medrano, era uno de los encargados de confeccionar un “reglamento del Poder Ejecutivo”. En la sesión del 17 de junio de 1816, planteó cierta duda de la comisión, que le hacía demorar la conclusión del referido trabajo.
Quería saber “si el reglamento debía contraerse precisamente a fijar las atribuciones y límites del Poder Ejecutivo, o si había de extenderse a todos los objetos sobre los que ha establecido reglas y formas el Estatuto Provisional (es decir el vigente, de 1915), o sobre cuáles de estos”. Fundó la consulta con argumentos en pro y en contra, “e inclinó su concepto al primer extremo de la duda consultada”.
Según la crónica de “El Redactor”, el asunto se debatió “con variedad”. Al fin, iba quedando acordado que, como la comisión tenía ya muy adelantado el proyecto, se esperara a que lo presentase, para recién tomar una resolución. Entonces, intervino el diputado José Mariano Serrano. Planteó la necesidad de acallar “el disgusto de los pueblos”, disconformes con artículos del Estatuto. Y propuso que la comisión se ciñera al “deslinde de facultades y límites del Poder Ejecutivo”, y que luego se nombrase otra, para la reforma del Estatuto. Su propuesta fue aprobada.
“Últimamente- dice “El Redactor” en su crónica- se trajo a consideración la representación del Cabildo de Mendoza, reclamando la continuación en el mando de aquella provincia de su digno jefe, don José de San Martín”. Se acordó elevar el asunto al Director, “con recomendación especial para que proveyese según el mérito de la solicitud”.