República de Tucumán: el prócer del rostro desconocido
No existe un retrato auténtico de Bernabé Aráoz.
No existe un retrato auténtico de Bernabé Aráoz.
En diciembre de 1851, Juan Manuel de Rosas obligó a su sobrino Lucio V. Mansilla a ingerir siete enormes platos de arroz con leche, como sanción por no haber ido a despedírsele cuando viajó a Europa.
Desde 1907 hasta 1913, el senador Alberto León de Soldati luchó infructuosamente para que el Congreso convirtiera en ley su proyecto de ferrocarril de Catamarca a Chile.
Ante el general Manuel Belgrano tuvo que capitular el ejército enemigo íntegro, entregando hasta la bandera del rey y jurando no volver a combatir.
El día previo a su fusilamiento, entregó unos apuntes al cura de Trancas, Miguel Martín Laguna.
El mayor retirado Carlos Domínguez fue elegido para mandar Tucumán en 1946. Su progresista período se caracterizó por la abundancia de obras públicas.
Un personaje irrepetible del escenario científico y cultural de Tucumán, fue el famoso doctor Antonio Torres.
El puntano Juan Pascual Pringles mostró su valor en decenas de batallas de la independencia y las guerras civiles.
Resuelto partidario de la revolución desde 1810, fue “Protector” de la Fábrica de Fusiles y gobernador por breve tiempo.
Una bala le fracturó el brazo derecho y se lo inutilizó para siempre, en 1815, en la derrota de Venta y Media. Siguieron semanas de muchos sufrimientos.
El futuro presidente luchó como voluntario de los peruanos en la Guerra del Pacífico. Herido y prisionero, tuvo heroica actuación.
Pasaron desapercibidos los dos siglos del nacimiento de la gran educadora, muy valorada y admirada por Sarmiento.
El golpe militar que derrocó al presidente Juan Domingo Perón en 1955, curiosamente no alteró la vida de la provincia. Sólo se registró algún incidente sin importancia.
La tonante gestión del comisionado Alberto Baldrich, fue acompañada por notorios militantes del nacionalismo.
En 1829 fue derrocado el gobernador José Manuel Silva por un motín militar. Su cabecilla se encaramó en la gobernación y ejerció, por casi dos meses, un poder absoluto.
El tucumano Benjamin Matienzo intentó cruzar la cordillera en su avión en 1919. Hizo un aterrizaje forzoso y murió cuando trataba de llegar a pie a un refugio de mineros.
La fundó el gobernador Marcos Paz en 1858 y se instaló en el Colegio San Miguel.
Fray José Manuel Pérez representó a Tucumán, con el doctor Salustiano Zavalía, en la Constituyente de 1853.