Imagen destacada
EL GENERAL OCTAVIANO NAVARRO. El destacado catamarqueño mandó las fuerzas de la Confederación, que vencieron a los tucumanos en el combate de El Manantial. LA GACETA / ARCHIVO

Tocada en 1861, en el combate de Manantial.


El 4 de octubre de 1861, en “el campo y puente de El Manantial”, se enfrentaron las fuerzas “confederadas” del general Octaviano Navarro, con las “liberales” del Gobierno de Tucumán, mandadas por José María del Campo. Tras una hora y media de combate, Navarro quedaría dueño del campo. El general catamarqueño, nacido en 1826 y fallecido en 1884, había sido progresista gobernador de su provincia en 1856 y, en el momento de la batalla, se desempeñaba como jefe el IV Cuerpo de Ejército de Centro de la Confederación Argentina.

De este episodio, que fue uno de los muchos que agitaron al norte durante la época posterior a la Organización Nacional, nos interesa sólo un detalle. Es tradición que, durante la batalla, la Banda de Música del ejército vencedor animaba a la tropa con la marcha “General Navarro”. Es que Navarro había adoptado desde tiempo atrás esa música para sus fuerzas y, en Catamarca, la banda provincial daba todas las tardes una vuelta a la plaza y la ejecutaba frente a su residencia.

Pasaron las décadas y se perdió la memoria de la marcial música. Eso hasta que el doctor Patricio Navarro Zavalía, descendiente del general, encontró en 1969, entre los papeles familiares, una partitura de la marcha, arreglada para piano por el capitán Ángel Spadini en 1857.

La facilitó al teniente de Banda, Ramón Isaías Decurnex, del Regimiento 19 de Infantería, y este llevó a cabo la orquestación para banda. Luego -según cronicaba LA GACETA del 19 de diciembre de 1969- durante una sencilla ceremonia, se volvieron a escuchar, ejecutados por la Banda del 19 en el patio del cuartel, los acordes que habían resonado, 108 años atrás, en el combate de El Manantial.